The Queen
(La Reina)
LARGA VIDA A MIRREN
(La Reina)
LARGA VIDA A MIRREN
En estos momentos hablar de la actriz inglesa Helen Mirren es hablar derechamente de la actriz más respetada a nivel internacional, porque no deja de ser anecdótico que la misma profesional que interpretó a las dos reinas Isabel más mediáticas en la historia de Inglaterra, haya sido catalogada casi unánimemente como la mejor actriz del año. En este 2006 Mirren le dio vida a la pelirroja reina del siglo XVI en la memorable producción televisiva “Elizabeth”, transmitida en el cable por Hallmark, y al poco tiempo tuvimos noticias de su rol como la madre de Carlos, y por ende, la suegra de la fallecida Lady Diana, viéndose enfrentada al que tal vez ha sido su peor trance desde que es soberana.
Este último punto es el motivo central que mueve los hilos en The Queen, dirigida por el británico de origen judío Stephen Frears, y que se perfila como uno de los mayores estrenos en la cartelera local en los próximos meses, más aún si Helen Mirren termina siendo la ganadora del Oscar a mejor actriz protagónica, una nominación y un triunfo que se entenderían perfectamente, porque la también conocida detective Jane Tennison en la serie televisiva “Prime Suspect” hace una magistral interpretación de la reina Isabel II, tanto así que cuesta disociar al personaje real con esta profesional que le ha dado vida en el cine.
Cuando finalizaba agosto de 1997, nadie se imaginó que un triste accidente automovilístico ocurrido en la medio de la noche parisina pondría a prueba a la monarquía más importante de Europa. Ni siquiera la muerte de un ícono del siglo XX como lo fue Diana Spencer podría haber supuesto que haría dudar a la mismísima Reina Isabel, su ex suegra, de continuar o no a la cabeza del trono, ya que como nunca antes esta poderosa mujer se vio enfrentada en el duro dilema de proseguir con su flemática altivez, una característica tan propia de los ingleses, o por el contrario, darle en el gusto a una parte importante de sus súbditos, la inmensa mayoría, quienes le exigían un poco más humanidad con la difunta y con ellos mismos, es decir, con su evidente dolor.
El director de “Alta Felicidad” y “Negocios Ocultos” tiene la virtud de recrear todas las aristas que rodearon la semana en que la reina no prestó mayor consideración con el deceso de la princesa de Gales, y futura Reina Madre. Por una parte, se muestra el zigzageante comportamiento de un caricaturesco Tony Blair (Michael Sheen), quien pasa del tono despectivo, aunque en privado, frente a la propia y las formalidades con la corona, mientras que por otro lado pareciera que él mismo se termina por creer su papel de estadista y protector al salir en su defensa. Al parecer el descrédito en que ha caído por su total apoyo a George W. Bush lo ha hecho merecedor de interpretaciones tan notables como la de Sheen.
Pero así como el actual primer ministro británico es presentado como un conspicuo político oportunista, uno más entre tantos, es en definitiva el personaje secundario más significativo en la trama, ya que es su propia comprensión del beneficio que puede obtener con la muerte de la “Princesa de Corazones” el motivo que lo hace enfrentarse diplomáticamente con Isabel II, para hacerle ver que debía responder al clamor popular de sus súbditos y de la comunidad internacional. La complicada reina en cambio, aún dudaba si mostrarse un poco más dolida, o seguir prestándole oídos a la Reina Madre (Sylvia Syms) o a su engreído marido, el príncipe Felipe (James Cromwell), ambos detractores de Diana y eternos amantes del rígido protocolo real. Carlos por otra parte, interpretado por Alex Jennings, queda en tal mal pie que Stephen Frears no dudó en presentarlo como un timorato que prefiere dejar a su madre como responsable de la dureza del Palacio, librándose él del juicio público.
Así entonces, “The Queen” se convierte en un film de personajes, donde cada uno de ellos justifica su proceder según los calculados pasos que los acontecimientos les van presentando. Es Blair quien se anota un espectacular triunfo político al doblegarle la mano a la reina a quien le juró lealtad, pero en el terreno de las actuaciones es Helen Mirren quien brilla por sobre el resto, no solo por su rol protagónico, sino porque su cuerpo y su mente parecen mimetizarse con los de Isabel II, al punto de sorprender a quienes la observamos dándole vida a la monarca en escenas donde difícilmente veríamos a la original siendo víctima de sus indecisiones y debilidades, al punto de pensar en terminar con un reinado que no pocos consideran como impuesto.
“The Queen” no ofrece casi ningún otro atributo destacable que no sea el de las actuaciones, específicamente las de Mirren y Sheen, ya que una fugaz fotografía de la campiña inglesa no logra siquiera entusiasmar comparada con las maniobras de los personajes. Las recreaciones de Buckingham también son un buen acierto, pero lejos de impresionar. En definitiva entonces, estoy seguro que para algunos esta película de Stephen Frears podrá parecer un simple folletín, sin embargo no siendo una película que deslumbre, al menos la sola presencia de la actriz del momento suple cualquier carencia que la película pueda exhibir. Preguntar hoy en día si te gusta o no Helen Mirren, es casi lo mismo que haberlo hecho años atrás con una Greta Garbo o una Glenda Jackson.
Muy Buena
Ficha Técnica:
Nombre: La Reina (The Queen)
Género: Drama
Dirección: Stephen Frears
Guión: Peter Morgan
Reparto: Helen Mirren, Michael Sheen, Alex Jennings, James Cromwell, Sylvia Syms, Helen McCrory, Roger Allam, Tim McMullan
Producción: Andy Harries, Christine Langan y Tracey Seaward
Fotografía: Affonso Beato
Música: Alexandre Desplat
Montaje: Lucia Zucchetti
País: Reino Unido
Idioma: Inglés
Duración: 97 minutos
Año: 2006
Link: http://www.thequeen-movie.com/
Trailer
El Emmy por mejor actriz protagónica en Elizabeth, de HBO Films, fue el preámbulo del gran año 2006 para Helen Mirren, sin ninguna duda, la actriz del año.